Mi alma volará [...] yo me voy con *CRISTO* | Edwin Tejada

❝Mi alma volará, mi alma volará, al son de la trompeta,
mi alma volará [...]❞.

Esas letras de este canto han estremecido bien fuerte mis pensamientos desde que tengo memoria, a través de la voz de mi abuela. Amárrense los cinturones porque esto va a estar largo, les pido que solo lo lean cuando tengan tiempo, pues aquí hay mucho para reflexionar.

Mi abuela se fue de la tierra [falleció] en enero de este año [2020], TREMENDO AÑO ¿cierto?. Ella entonaba muchos cánticos, pero ese, el que dice: ❝Jesús viene en las nubes, a su iglesia levantar [...] Mi alma volará, mi alma volará, al son de la trompeta, mi alma volará❞, muchas veces lo escuchaba, este haciendo referencia al momento de la resurrección cuando Cristo regrese a la tierra, porque la Biblia dice que los muertos en Cristo resucitarán primero y los que hayan quedado serán arrebatados en los aires para recibir a Cristo en las nubes y así poder estar con El para siempre. Ese canto ha sido uno de los que más me ha impactado, porque sigue retumbando en mis pensamientos desde que ella partió. 

Ella fue el instrumento que Dios usó para que yo [y muchas personas más] conocieran la paz que sobre pasa todo entendimiento y la verdad que solo se encuentra en Jesucristo. Ella siempre aprovechaba [sin vergüenza ni miedo alguno] cada oportunidad para hablar de Jesús a todo el mundo, esa era su pasión, la cual cumplía con amor y responsabilidad durante todo su caminar en el Evangelio del Reino de los Cielos en el que ella decía que tenía mil años perteneciendo, [me daba risa cada vez que lo decía], ella era Evangelista por la gracia, misericordia y voluntad de Dios, de eso no tengo la menor duda. Muchos dicen que cuando alguien muere, siempre se dice que esa persona ❝era tan buena❞, pero todos tenemos defectos y ella de eso no se escapaba, pero también, estaba llena de virtudes que embellecían su vida. 

Su ocupación era Modista, ella tenía un pequeño taller en la casa el cual servía de sustento para la familia, era muy activa, esforzada y trabajadora, no sé como ella siempre encontraba algo que hacer; todos los días [desde que recuerdo] ella se levantaba muy temprano a estudiar la biblia, la leía completa siempre, y fueron muchas las veces que al despertar antes de irme al colegio, a la universidad o al trabajo me decía o me escribía en un papelito un versículo de la biblia para que yo lo estudiara o le dijera que yo entendía de lo leído. 

Yo recuerdo que ella siempre decía que yo fui el que la ❝puso❞ vieja [esa era la carta de presentación que ella usaba cuando yo conocía mayormente a sus clientes, amistades y conocidos, por primera vez], por ser el primer nieto, recuerdo que ella me decía que yo era un príncipe, luego nacieron mis otros primos y después me decía que era uno de sus príncipes, no sé la razón específica, pero ciertamente, por algo lo decía, ella era bien sabia. En fin, les contaré más sobre ella y la razón por la cual decidí incluir parte de su historia en este blog, pero por razones obvias, omitiré muchos detalles.

Como les dije anteriormente, su pasión era Jesucristo y lo compartía con todo el mundo, son innumerables las ocasiones que ella utilizaba metáforas y alegorías como ejemplo para hacer de su prédica [la forma de su discurso exponiendo la verdad de Dios y el plan de Salvación] más práctica y entendible ante los demás, una de ellas era esta:

❝Llega el día de las elecciones y asistes a tu colegio electoral, te buscan con tu cédula y si tú no estás inscrito en el padrón electoral, no puedes ejercer tu derecho al voto, así mismo, es el evangelio, el padrón electoral es el Libro de la Vida y tu cédula es la identidad que adquieres al momento de recibir a Cristo como tu Señor y Salvador [...]❞. Nidia Estévez de García

Ella siempre citaba la siguiente porción de la Biblia que se encuentra en el libro de Salmos:

❝Los días de nuestra edad son setenta años; y si en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan, y volamos❞. Salmos 90:10

Ella mencionaba mucho este versículo, y mientras tanto guardaba yo eso en mi corazón. Revisando algunas cosas de ella, encontré una cartita que mi hermana menor le regaló en su cumpleaños # 71, en la cual una parte decía: ❝...cumples 71 que de seguro significa que eres de las más robustas, pues, te faltan 9 años para cumplir 80 [...]❞, eso me ha puesto a pensar mucho en ese versículo, ella tenía 75 cuando se fue, es decir, que estaba a mitad de ser robusta.

Continuando con la historia, el año pasado [2019], ella empieza a padecer una situación de salud, le hacen una biopsia que da como resultado: Endometriosis, le recetan unos tratamientos que para mi entender eran para mujeres jóvenes y fértiles, ya que mi abuela tenía 75, seguimos buscando otras opiniones, porque realmente ese resultado no era convincente y el tratamiento no funcionaba, fuimos a donde otra doctora y también le recetó medicamentos que no hacían nada, luego encontramos otro doctor, le hace otra biopsia y el resultado fue: Adenocarcinoma Endometrial, ese día yo me puse a investigar que signfiicaba eso, luego de leer mucho, decido hablar con un familiar mío y ella me dice la verdad, honestamente, no estaba asimilando la situación, quizás estaba en shock. El el día de la consulta con el doctor llevamos los resultados y él nos explica muy profesionalmente, con mucho cuidado y tacto el diagnóstico, pero ya yo sabía lo que estaba pasando, ese día fue terrible, pero mi fe fue la que me permitió permanecer de pie, nos refieren a oncología para que luego de realizarse varios estudios, se le hiciera una cirugía lo más pronto posible, porque si no se hacía, se le podía complicar, pues tenía un tumor. Yo nunca me imaginé que ibamos a tener que atravesar por un proceso de esta magnitud, había escuchado y conocido casos como el de mi abuela, pero nunca lo había vivido tan de cerca.

 

Durante todo este proceso me aferré más a Dios como nunca en mi vida lo había hecho, oraba mucho, yo pienso que Dios ya sabía lo que le iba a pedir (aunque Él siempre lo sabe), pero le estaba pidiendo que se cumpliera mi voluntad, no la de Él. La abuela fue operada en Septiembre 2019, gracias a Dios todo salió bien, ella se pudo recuperar de la cirugía, pero era necesario que empezara con los tratamientos requeridos para este tipo de enfermedad. 

 

¿Qué decirles del dinero? un pedazo de papel que representa el valor de un servicio, en este caso de salud, la abuela no se escapaba de eso, necesitabamos mucho, pero muchísimo dinero, y no sabíamos que hacer ni de dónde lo ibamos a conseguir, mami empezó a fabricar cojines [forros] de muebles, vendimos llaveros, botones [de emojis], empecé a fabricar helados artesanales, hasta subí un vídeo a mis redes sociales solicitando ayuda, verdaderamente, estabamos bien necesitados, en fin, hicimos de todo para recaudar fondos para pagar todo lo que la abuela necesitaba y le doy gracias a Dios porque movió muchos corazones para ayudarnos. Varias personas se me acercaban y me decían que yo me estaba involucrando demasiado en este caso, que me apartara, porque yo era nieto, sinceramente, no entendía sus ❝consejos❞ porque yo estaba haciendo lo que correspondía, estaba ayudando a mi mamá y también a mi abuela, ❝no tengo un corazón de piedra❞, esa era mi única respuesta.

Durante todo ese tiempo, yo seguía orando en privado y otras veces, junto a ella, clamando al Dios todo poderoso, capaz de sanarla y hacer un milagro, pero vuelvo y repito, yo estaba pidiendo que se cumpliera mi voluntad, no la de Dios. 

Un día le pregunto a ella si Dios le había dicho o mostrado algo relacionado a su salud y su respuesta fue una sola sonrisa, par de días después ella me dijo: ❝Edwin, tú verás que yo me voy a levantar de aquí, tú sabes como yo era anteriormente a esto que me está pasando, Dios me ayudará a cruzar este [río] Jordán, tú veras que yo me levantaré, no te desalientes❞.

En todo este proceso, la abuela no se quejaba de cómo se sentía, ella decía que estaba bien, tenía una paz [la que sobrepasa todo entendimiento, la que solo Cristo da, esa], pero para mí y mi familia era bastante difícil verla en ese proceso lento, esto representaba un examen de paciencia, pero gracias Dios nos ayudó a no rendirnos.

Desde hace varios años ella hablaba temas relacionados con su partida, de manera aleatoria, y mi respuesta siempre era: ❝Dios es el que sabe cuándo eso pasaría❞, pero después que este proceso inició [en Mayo-Junio 2019] ella lo mencionaba bastante, eso me estaba preocupando pero tenía fe de que Dios siempre es el que tiene el control y El sabe cuándo pasarán los acontecimientos de la vida de cada persona en la tierra, aunque no les voy a negar, obviamente, no quería que ella se fuera.

Como les dije anteriormente, la cirugía fue en septiembre de ese año, la doctora nos consideró bastante con el precio, eran cinco procedimientos y varios de ellos no tenían cobertura por el seguro de salud. Los demás tratamientos empezaron en noviembre, uno de ellos terminó en diciembre y el otro el 10 de enero 2020, día en el cual, yo hice un video de agradecimiento a todas las personas (familiares, amistades y hermanos de la iglesia) que hicieron alguna donación y oraron por el proceso de mi abuela, pues en días antes de la operación yo [con bastante impotencia] hice un video el cual subí a las redes sociales, pidiendo alguna ayuda para poder realizarle la operación, que era bastante necesaria, yo ya había agradecido a todos los que aportaron pero no lo había hecho públicamente, y sentía que ese era mi deber, pues, fue públicamente que pedí la ayuda, sin yo saber que Dios me estaba guiando a dar esas palabras de agradecimiento antes de que ella partiera, porque su tiempo ya se estaba agotando.

Pasaron los días, fuimos al chequeo con la doctora [la que le realizó la cirugía], ella la notó un poco agotada, su respiración estaba fuera de lo normal, pero le indicó revisión con el Cardiólogo y Neumólogo y algunas medicaciones y se agendó una cita en par de semanas para chequeo de rutina, porque debían esperar un tiempo prudente para volver a realizarle los exámenes médicos correspondientes.

Mi mamá y yo la veíamos muy débil, llorábamos mucho, ella necesitaba tener a alguien día y noche acompañandola, no podía quedarse sola en la casa, durante todo este proceso mi mamá trabajaba y solo iba dos veces a la semana, pero ya en los últimos meses ella tenía que trabajar en horario normal, ya ustedes se podrán imaginar, el dolor y angustia que mami y yo teníamos, al saber que dejábamos a la abuela sola y sin ayuda, estando ella tan débil para irnos a trabajar, yo podía ir a la casa al mediodía para almorzar y estar con ella, eso me daba un poco más de tranquilidad.

El lunes 20 de enero 2020 ella tuvo su chequeo, y le recetaron más medicinas, ese mismo día en la noche la vimos tan mal que decidimos llevarla por emergencias a la clínica, duramos varias horas ahí y luego volvimos a la casa, sentí que no nos decían la verdad, en resumen, fuimos ese día a NADA. Llegó el día 23 de enero 2020, ella amaneció mal, vomitando, antes de irme al trabajo le digo a mami que se preparen para que fuéramos a revisarla a la clínica, la entran por emergencias, le hacen muchos análisis, revisan su cuerpo, luego nos mandan a una consulta con una geriatra, esa es la especialidad que se encarga de manejar los problemas y enfermedades de los envejecientes [sí, mi abuela estaba grave, y nos envían a una consulta a tomar turno], entramos al consultorio de la geriatra, ella empieza a hacer las preguntas según el protocolo, la revisa, le explicamos como pudimos lo que estaba pasando (estábamos muy nerviosos), la doctora dice: ❝¡esto es una emergencia!❞ y yo dije: ❝¡CLARO QUE LO ES!❞, volvimos a la emergencia de nuevo, y allí la revisan nuevamente y la doctora le dice a mi mamá: ❝en cualquier momento ella se puede ir❞, después me lo dicen a mí, no sabíamos ni qué pensar, luego la entraron a la Unidad de Cuidados Intensivos en Emergencias, lo único que pude decirle a mi mama fue: ❝Mami, nosotros hicimos todo, TODO, lo que pudimos y lo sabes, pero Dios es el que sabe, nosotros hacemos lo posible y Él lo imposible❞. No sé si ella me escuchó pero ahí empezaron a hacer muchas preguntas sobre ventiladores, resucitación, etc., términos médicos que, honestamente, me entraban por un oído y me salían por el otro. Luego, nos dijeron que ella iba a permanecer en UCI [de emergencias] hasta nuevo aviso, el horario de visitas era restringido. Yo estaba desesperado por hablar con la abuela, necesitaba hacerlo, le estaba rogando a Dios que me lo permitiera y lo logré, y presten atención a esta parte que es la razón fundamental por la cual decidí contarles todo esto, ya eran las cuatro y algo de la tarde, pude entrar y hablar con ella:

Edwin: Abuela. ¿Cómo te sientes?
Abuela: Estoy bien, aquí gracias a Dios, viva, ¿cuándo nos vamos para la casa?
Edwin: cuando los médicos digan, hay que esperar que usted se recupere, abuela, ¿Dios le ha dicho algo?
Abuela: Edwin, yo me voy con Cristo, y nos volveremos a ver.
Edwin: *ME QUEDE CON LA BOCA ABIERTA*, Yo quería responderle con mi respuesta de costumbre, pero solo pude decir: Amén. Después, hablamos otras cosas y salí, le dije: nos vemos ahorita.

Los demás familiares fueron enterándose y la visitaron, pasaron las horas y llega el otro día, ese terrible día. Yo en todo este tiempo siempre tenía claro en mi mente y en mi corazón que Dios tiene el control, y tenía fe de que ella iba a mejorarse. Mami amaneció con ella en emergencias y yo en la casa, me preparé para ir al trabajo y voy en la mañana a ver a mami y a la abuela, hablé con ella y todo bajo control, hago lo mismo al mediodía. Salgo del trabajo y vuelvo a la clínica, allá seguía bajo control, varios de nuestros familiares fueron a verla y todos teníamos fe de que Dios haría el milagro de su recuperación.

Llega la noche, nos dicen que nos fuéramos para la casa porque ella iba a permanecer en UCI [de Emergencias], nos iban a llamar cualquier cosa que necesitaran, llegamos a la casa y nos acostamos, pero yo no me dormí, como a las 11:30 p.m. aproximadamente suena el celular de mi mamá, yo pensaba que era algún familiar o amiga de ella, pero no, eran de la clínica, necesitaban que fuéramos. Mi mamá y yo fuimos, la encontramos despierta [ella nunca perdió el conocimiento], ella nos vió y yo pensé: ❝la abuela es tan valiente y esforzada❞, luego, la geriatra me llama y me pone en un lugar aparte, y me dice la verdad, [yo siento que esa fue la doctora que más sincera fue con nosotros], me dijo: ❝ahora si es verdad que en cualquier momento próximo ella se va a ir, ustedes y nosotros hemos todo lo posible para que su salud mejore, pero lamentablemente, su pronóstico no es favorable, lo lamento❞, esas no fueron sus palabras exactas, pero es lo que recuerdo, luego se lo dice a mi mamá y ahí empieza el dolor más intenso que antes, mi mamá se puso muy mal y tuvieron que medicarla. 

Yo estaba gestionado para que asistieran a mami y me llama la doctora y me dice que ya la abuela se había ido de esta tierra, entré a la habitación de UCI, me quedé en shock y pensé que quizás solo esperaba vernos para decirnos adiós. Luego empecé a hablar sobre ella con la geriatra, y le dije que ella me había dicho que se iba con Cristo, y geriatra dijo: ❝wow, que fe tan grande❞, yo le dije que ella fue que me la enseñó y ahí fue que empecé a llorar, lo más normal, era mi abuela y segunda mamá que se había ido, y yo solo pensaba desde ese momento: ¿Cómo yo le voy a decir eso a mami? [que estaba medicada por el dolor que tenía]. 

A mí me tocó hacer los trámites del acta de defunción, llamar algunos familiares y hacer la gestión de los servicios fúnebres. Fui esa misma madrugada a la funeraria, y allá recuerdo un sueño que tuve en el 2017 en el cual ví a la abuela en un ataúd blanco, por eso lo elegí de ese color, lo demás es irrelevante que lo mencione, porque ese dolor [inexplicable] hay que vivirlo para poder entenderlo.

Mi abuela estaba tan convencida de que estamos en esta tierra de paseo, en un viaje temporal que no se sabe con certeza cuando termina y para mí ha sido bastante difícil aceptar esta realidad, pero solo Dios puede ayudarnos a sobrellevar una situación de esta magnitud. Su testimonio de fe y perseverancia me confrontan cada día y también, el hecho de saber que ella estaba tratando de hacernos tener consciencia de que no estaremos para siempre en esta tierra, ella lo tenía tan claro, por eso lo mencionaba tanto, cuando ella se fuese de esta tierra.

Ahora quiero hablarles un poco de algo que muchos omiten, la muerte. Según el diccionario de la Real Academia Española la muerte es la cesación o terminación de la vida. Este es un tema tabú que en la mayoría de los escenarios solo lo menciona superficialmente o cuando estamos en la escuela primaria en la que nos enseñan el ciclo biológico de la vida que consiste en el nacimiento, crecimiento, reproducción y la muerte. 

Es necesario entender que nos va a pasar una de dos: la muerte [que para los que creemos en Jesucristo, es dormir en El] donde el cuerpo vuelve al polvo y el aliento de vida [espíritu] vuelve a Dios quien fue lo dio, o permanecer vivos cuando acontezca el retorno inminente de Cristo a la tierra, momento en el cual la Biblia dice que los muertos en Cristo [los que vivieron y  confiaron en El] resucitarán [despertarán] primero y los que hayan quedado vivos [en la tierra] serán arrebatados con ellos en las nubes para recibir a Jesucristo en el aire y poder estar por siempre con Dios.

❝Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras❞.

1 Tesalonicenses 4:13-18

Por lo tanto, conociendo esta verdad, solo Dios sabe que nos tocará, no debemos permanecer en la tristeza porque tenemos esa esperanza en Cristo, debemos vivir el duelo saludablemente sabiendo que el mismo es temporal para poder sanar. Es un proceso de dolor normal y no vivirlo o reprimirlo puede abrirle la puerta a situaciones peores en nuestra vida. Tengamos paz porque creemos en esta esperanza que Dios ha prometido.

Mi abuela se fue de la tierra porque ya el propósito de Dios a través de ella se cumplió, no por ninguna otra razón, en varias ocasiones no quería entender esto pero la verdad es que así, Dios lo estableció, pues es nuestro dueño, y es como ella me decía: 

❝A Dios solo se le obedece, no se le cuestiona, ni se le da órdenes, porque Él no es un muchacho de mandados, le debemos tener respeto, y reverencia❞. Nidia Estévez de García

Mi consejo es que tratemos de vivir para Dios como ella lo hizo y solo así podremos transitar en esta vida [terrenal] de la mejor manera posible, sin el afán que acarrea este sistema, vivir como Dios quiera, obedeciendo Su Palabra y confiando en Él. Ella no tenía muchas riquezas económicas pero ella millonaria porque tenía a Dios en su diario vivir, nunca la escuché quejarse de su difícil proceso, más bien le daba gracias a Dios porque estaba viva.

De ella aprendí muchas cosas, pero lo que más me impactó fue su fe tan firme en Dios, sin tenerle miedo a ninguna enfermedad, ni operación, ni a la muerte [decía que estaba lista para irse con Cristo, en varias ocasiones lo repetía], ella estaba tan confiada en Dios, y saber lo que ella me dijo y de la forma que me lo dijo me ha confrontado y lo hará hasta el resto de mis días, le doy muchas gracias a Dios por haberme permitido despedirme y hablar de la forma que lo hicimos. Hablando con mi mamá sobre esto, ella me decía que veía [en sus últimos momentos] a la abuela tan contenta de poder irse con Cristo, ese gozo era tan tangible que hasta le hacía guiños a mi mamá, y ¿qué decir de ella?, mi mamá cuidó a mi abuela como nunca, su entrega y sacrificio fue admirable, le doy gracias a Dios por ella.

Desde que recuerdo, ella siempre me mencionaba y a algunos familiares, que cuando ella partiera de esta tierra que en su funeral o lápida, pusieran la siguiente verdad de Dios plasmada en estos versículos:

❝Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí [como Salvador], aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? ❞.
Juan 11: 25-26

Nunca le pregunté la razón, pero guardaba eso en mi corazón, solo le decía que: ❝Dios es el que sabe cuándo eso pasaría [su partida]❞. No lo pudimos poner en su lápida, pero si hice un arte y se lo entregué a todos los que la conocían, y ahora se los regalo a ustedes, todos los que han leído estas líneas hasta aquí:

Si algo puedo decirles antes de terminar este largo texto es lo siguiente:

❝El fin de todo discurso es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o mala❞.

Eclesiastés 12:13-14

A todos los que estén pasando por una situación similar o de esta magnitud: a los familiares directos del paciente, traten siempre de mantener la calma, la unidad y ser constantes en la oración, y a los demás, no emitan opiniones al respecto sin ser médicos especialistas en el área o sin tener conocimento detallado del cuadro clínico del paciente, créanme que eso no ayuda en nada porque cada caso es individual, por favor, NO COMPAREN LOS CASOS. Sobre todo, nunca olviden que Dios es el que tiene la última palabra definitiva y la verdad absoluta de cualquier diagnóstico, y yo sé que El prometió sanar a mi abuela y así lo hizo, y ya ella está sana y libre de toda dolencia y de cualquier enfermedad.

Si estás leyendo esto y ha fallecido alguien a quien amabas, sea un familiar o amistades, debes entender que es normal que sientas tristeza, no es un pecado llorar, las emociones están ahí porque Dios así lo ha permitido, lo importante es desahogarte, vivir tu dolor, porque si no lo vives, tendrás problemas en tu salud física y mental. Vive un día a la vez, de la mano de Dios, es muy importante que no reprimas tus emociones, pero no permitas que tus emociones te gobiernen, si necesitas ayuda no dudes en buscarla, vas a estar bien, gracias a Dios te lo digo por experiencia, a mi abuela nunca la olvidaré, y me hace una falta impresionante, pero ahora mismo no puedo hacer nada, solo confiar en la promesa que Dios nos ha dado y en la cual ella creyó, que estaremos con El para siempre.

Antes de finalizar, quiero darle las gracias a Dios por siempre ayudarnos en todo este proceso, sin su ayuda no sé qué hubiese pasado, muchas gracias a todos los familiares, amistades, vecinos y hermanos de la iglesia que nos brindaron su apoyo, oraciones y donaciones, les diré como decía la abuela: ❝Dios se los pague❞, y no porque su apoyo fuese una transacción, sino porque dando es que se recibe.

De verdad, muchas gracias a todos, aunque quizás no lo crean o no entiendan, pero me ayudaron hasta con el simple hecho de escucharme o aguantar quizás el no responderles sus llamadas o mensajes a tiempo, solo Dios sabe cómo me he sentido, pero ustedes han sido de bastante apoyo para mí y mi familia, Dios les bendiga, guarde y recompense su apoyo, tanto en recursos, como en oraciones y su tiempo.

Una vez más, les quiero dar las GRACIAS por haber tomado de su valioso tiempo en leer estas líneas, sé que fue largo, pero era demasiado lo que tenía que decir, y lo he compartido con ustedes porque me hubiese servido de mucho haber conocido estas verdades antes para estar preparado para este proceso que viví y quizás, este escrito le ayude a alguien que esté pasando por algo similiar, he llorado y reído escribiendo todo esto y solo espero que les sirva de ayuda. Les reitero que omití muchos detalles e informaciones por cuestiones de privacidad y prudencia.

Pueden seguir leyendo el complemento de esta publicación, en el cual podrán ver los Anexos con más detalles relacionados a este escrito y al duelo de una forma más explicativa y visual, para su provecho haciendo click aquí: ------> https://bit.ly/33W9mp1

¡Dios les bendiga y guarde!

Edwin Tejada

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